El World Trade Center, un ícono cultural de Nueva York, fue destruido por un ataque terrorista en el año 2001. Han pasado 18 años desd...
El
World Trade Center, un ícono cultural de Nueva York, fue destruido por un
ataque terrorista en el año 2001.
Han
pasado 18 años desde aquella trágica mañana del 11 de septiembre del 2001.
Para
muchos parecía solo un sueño (o una pesadilla) que aquellas altas estructuras,
diseñadas con la más alta tecnología, se derrumbaran ante sus ojos dejando
luto, dolor e incertidumbre entre los ciudadanos de New York, luego de que
aviones secuestrados por terroristas yihadistas impactaran sobre las Torres
Gemelas.
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| Foto: Mark LaGanga |
Fernando
Salazar, un boliviano que residía en Nueva York por aquel tiempo, cuenta que
aquella mañana dejó a sus niñas en la escuela y luego se dirigió a Manhattan en
busca de trabajo.
Al
enterarse de lo ocurrido “me sentí
preocupado por mis hijas, señala, por
si les había pasado algo, retorné al colegio a recogerlas, pero una vecina ya
las había recogido. Luego regresé a mi casa, llamé a mi esposa que trabajaba en
Manhattan, menos mal estaba bien”.
Fernando
recuerda que aquellos días fueron de mucha preocupación para los habitantes de
Nueva York, muchas actividades se vieron paralizadas por el desastre y se necesitaron
varios días para que la vida en la Gran Manzana retornara a la normalidad.
La
tragedia afectó a muchas familias, pues eran miles las personas que trabajaban
en el World Trade Center, y también miles de turistas que lo visitaban. Pero,
más allá de lo personal, el atentado revelaba la frágil seguridad de los
Estados Unidos ante los ataques terroristas.
A
pesar de los años, aún se siente su ausencia, el pueblo norteamericano recuerda con
nostalgia aquellas altas torres y rememora también a los valientes bomberos que
arriesgaron sus vidas intentando buscar sobrevivientes entre los escombros.
Muchos murieron en el intento.
Hoy,
en aquel lugar que albergaba a las Torres Gemelas, se encuentra el Museo
Memorial 11/S (11 de Septiembre), inaugurado el año 2014, que a su vez es un
cementerio que guarda los restos de muchas víctimas del suceso, y donde cada
año se conmemora a las víctimas y a los héroes de una tragedia sin precedentes
en Nueva York.


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